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La playa La Roda es el tipo de lugar que parece inventado. Su ubicación junto al centro urbano de Altea, su agua transparente, su paseo lleno de vida y la cantidad de actividades que puedes hacer la convierten en mucho más que una playa. Lo que no todo el mundo sabe es que existe una forma de conocerla —y de conocer Altea— desde otra perspectiva. Hablamos de lanzarse al mar en una de las motos de agua en Altea de Fun&Quads. Pero no vamos a adelantarlo todo tan pronto. Este artículo guarda algunos secretos para quienes saben disfrutar.
Vamos a hablarte de una playa diferente, sin la masificación habitual de otras zonas del Mediterráneo, con ese punto de calma que solo ofrecen los cantos rodados blancos y el sonido de las olas tranquilas. Y además, te vamos a contar cómo transformarla en una experiencia única. A veces, la diferencia entre un buen verano y un verano inolvidable está en los detalles. Así que sigue leyendo.
Índice de contenidos
Qué hace especial a la playa La Roda en Altea
Situada justo junto al casco antiguo y extendiéndose desde Cap Negret hasta el puerto pesquero, la playa La Roda es una de las más animadas del litoral alteano. Es una playa urbana, de grava y cantos blancos, cuidada, limpia y con servicios de primer nivel como socorristas, pasarelas accesibles y aparcamiento cercano. Pero más allá de las comodidades, su mayor atractivo es intangible: es un lugar donde el tiempo parece ir a otra velocidad.
Desde aquí se contempla el Peñón de Ifach y la Sierra Helada, dos gigantes que rompen el horizonte marino. Y si giras la vista hacia tierra firme, te encuentras con uno de los paseos marítimos más agradables del levante: restaurantes pequeños con encanto, heladerías artesanas, tiendas de verano y centros náuticos que operan todo el año. No hace falta irse lejos para sentirse de vacaciones.
Qué hacer en la playa de Altea más céntrica
La playa de Altea que más cerca está del pueblo no es solo un lugar para tumbarse al sol. Es también un punto de partida para vivir experiencias distintas. A pesar de estar junto al núcleo urbano, es una zona tranquila, ideal para practicar deportes náuticos.
Y si te apetece un paseo relajado, el Paseo Marítimo que acompaña la playa La Roda es perfecto para perderte sin rumbo, con el sonido del mar a un lado y las fachadas blancas del pueblo a otro. Desde aquí puedes acercarte fácilmente al puerto pesquero o subir al casco antiguo, con sus calles adoquinadas y sus miradores. Sin embargo, hay una manera de verlo todo desde una perspectiva completamente distinta y es en moto de agua.
Alquiler de motos de agua en Altea: la experiencia más emocionante
Altea es preciosa desde tierra, pero cuando la recorres desde el mar, gana aún más. Fun&Quads te ofrece la posibilidad de alquilar tu propia moto de agua, con gasolina incluida y todo el equipo necesario para que solo tengas que preocuparte de disfrutar.
El alquiler de motos de agua en Altea es una opción perfecta si buscas una dosis de adrenalina, pero también si te apetece vivir el Mediterráneo con libertad. Puedes elegir salidas de una a cuatro horas, moverte entre calas, bordear la costa, parar en lugares escondidos o simplemente acelerar y sentir el viento en la cara.
Si tienes licencia de navegación, puedes lanzarte por libre. Y si no, Fun&Quads también te ofrece salidas organizadas con monitor, sin necesidad de carnet. Aquí no se trata de saber, sino de querer vivir algo distinto.
Las excursiones en moto de agua de Fun&Quads que no te puedes perder
Navegar desde la playa La Roda en una moto de agua no es solo velocidad y salpicaduras. Es tener acceso a lugares que desde tierra no se alcanzan. Fun&Quads organiza tres rutas principales que combinan aventura, belleza natural y un punto de exclusividad.
La excursión a la bahía de Altea parte desde Portosenso y te lleva hasta la Isla de la Olla, donde se ve el pueblo desde el mar con una panorámica que no olvidarás. Otra opción es la ruta a la Sierra Helada, que explora un espacio protegido con calas y acantilados de postal. Y si prefieres algo intermedio, puedes elegir la excursión al Faro del Albir, que incluye parada para baño, fotos y visita a la Isla Mediana, también conocida como “la isla de los pulpos”.
Todas estas salidas son accesibles, seguras y aptas incluso para quienes nunca han pilotado una moto de agua. Los instructores explican todo con calma y el equipamiento está incluido. Lo único que necesitas es traer las ganas.
Playas de Altea: entre la calma, la belleza y la emoción
Quienes buscan playas de arena quizá no entiendan el encanto de las playas de Altea. Aquí, los cantos blancos, el agua límpida y la ausencia de aglomeraciones crean un ambiente que invita a quedarse más tiempo del previsto. Pero además, la opción de combinar sol y mar con actividad y descubrimiento es lo que convierte estas playas en una experiencia más completa.
Fun&Quads ha sabido entender el espíritu de esta costa. No solo ofrece alquileres, sino una forma de reconectar con el entorno. En sus salidas no solo navegas, también miras, sientes y entiendes por qué Altea es uno de esos lugares que marcan.
No se trata de hacer más cosas, sino de hacerlas mejor. Y recorrer la playa La Roda y su entorno en moto de agua no es solo una buena idea. Es una de esas decisiones que recordarás cuando el verano haya terminado.
